Educación pre-escolar

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El Jardín de Niños (donde brotan los niños y se alimenta su mente, cuerpo y alma) y la importancia y corrientes de enseñanza, fue el tema que trató la Mtra. Marisol de la Cerda Roa, quien es directora del Jarín de Niños del Colegio Internacional Terranova en San Luis Potosí. Al contrario del conductivismo, el constructivismo estimula el interés de los niños por aprender. El primero tiene dos líneas principales "el aprendizaje por reforzamiento" y "el asociacionismo", esto es repetir, memorizar, imitar lo que el profesor muestra. El constructivismo, por otro lado, hace énfasis en la "acción" como parte del proceso congnitivo. Esto requiere guiar al alumno a través de su creatividad y juego a querer aprender, a descubrir por si mismo las respuestas a sus propias preguntas. El alumno pasa de ser un ente pasivo que recibe informació y la duplica a ser un individuo activo que busca, construye y experimenta. El resultado es el aprendizaje y la capacidad de construir para sí mismo una estructura de conocimiento. El constructivismo se puede resumir en los cuatros ejes de desarrollo: motor, cognitivo, emocional y social. Marisol nos platicó de los constructivistas como Papert, Piaget, incluso de los primeros ideólogos educativos como Jean Jacque Rousseau con obras como Emilio o la Educación, publicada en 1762 y que demostraba la importancia de un desarrollo integral, no sólo de conocimiento, si no afectivo. La mayoría de los colegios actuales, de cualquier nivel, se dedican a una enseñanza, principalmente, conductivista (memorizar, repetir, etc), aunque intentan derrepente introducir algunos métodos constructivistas. Otras instituciones, como el Terranova, promueven el constructivismo como aproximación a la enseñanza de niños desde el jardín de niños, es decir, en la etapa más importante de desarrollo humano, hasta los 6 años de edad. Como dicen "los niños son como esponjas", trillado pero cierto. Saludos a todos.